"Las situaciones de desigualdad en el acceso a la asistencia sanitaria (...) podría verse incrementada por la crisis económica y las medidas adoptadas por esta".
Primera línea del informe "censurado" por el Sergas -al hilo del copago farmacéutico y la anulación de las tarjetas sanitarias a los inmigrantes irregulares empadronados- que provocó la renuncia de siete expertos de la Comisión Galega de Bioética y que este miércoles ha hecho púbico la Consellería de Sanidade.
El documento titulado "Desigualdades en la asistencia sanitaria" se cierra con la petición al Sergas de que sea difundido.
Ayer precisamente Sanidade anunciaba que el informe vería la luz tras sentarse con los miembros de la Comisión tras la encendida polémica que llevó incluso a la oposición a pedir la dimisión de la titular Rocío Mosquera. Ese encuentro se zanjó con el compromiso de dotar de mayor independencia a la comisión.
Los expertos, en cinco páginas, abren "una reflexión" por la "posible existencia de un conflicto ético" al hilo del Real decreto ley 16/2012 de medidas urgentes para garantizar la sostenibilidad del Sistema Nacional de Salud, donde entre otras medidas se establecía el copago farmacéutico.
"Las situaciones detectadas de desigualdad en la práctica asistencial ordinaria, que evidenciaron disfunciones cuyo origen parece que está tanto en el propio sistema como en el comportamientos de los profesionales y de los usuarios", apunta. Y añade: "Desigualdades derivadas del contexto actual y de las desigualdades preexistentes".
La Comisión Galega de Bioética, en su función de asesora de la Consellería de Sanidade y del Servizo Galego de Saúde, lanza las siguientes reflexiones a modo de conclusión:
1/ El conjunto normativo vigente parece obligar a que las medidas que se adopten en relación con la sostenibilidad del Sistema de Saúde de Galicia armonicencon los objetivos de la medicina; la obligación éitca de mantener un sistema sanitario orientado a lograr la equidad; el Real decreto lei 16/2012 puso en cuestión los principios de universalidad, equidad y gratuidad del modelo ético del Sistema Nacional de Saúde, al garantizar la asistencia sanitaria completa solo a aquellas personas que tuviesen la condición de aseguradas o beneficiarias e igualmente se "sacudieron el valor superior de la igualdad, recogido en el artículo 1.1 de la Consittución española, y el derecho fundamental a la salud.
2/ Desde su publicación, son numerosas las voces autorizadas que se manifestaron en contra del Real decreto ley 16/2012. Transcurridos más de dos años, la pertinencia ética del análisis tiene su razón de ser porque aún cuando sus efectos se perciben como parcialmente paliados gracias al esfuerzo de diferentes agentes y colectivos, esto no deroga esta norma con fuerza de ley, ni cambia su mandato.
Más bien al contrario, la precariedad que genera esta situación y la denuncia permanente que acompaña el empeño de mitigar sus efectos en el ámbito sanitario, jurídico y social, no hace sino reforzar la valoración negativa que la Comisión Galega de Bioética comparte sobre la devandita norma y fortalecer su deber de hacer partícipe de esto a la Consellería de Sanidade e al Servizo Galego de Saúde, a quien asesora.
3/ En el proceso de deliberación realizado, se detectaron distintas fuentes favorecedoras de situaciones de desigualdad en la asistencia sanitaria. Una parte de estas situaciones de desigualdad está instalada en el sistema con independencia y anterioridad al decreto.
Desde la Comisión instan finalmente a seguir profundizando y se adopten desde la Xunta las medidas necesarias para revertir la situación." (La Opinión, 11/03/201)
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